Opiniones de lectores dispersos sobre el libro Estudios republicanos: Contribución a la filosofía política y jurídica
Intercodex (Editorial Reus)
«Una reevaluación del constitucionalismo republicano»
Maribel Lucena. Valencia
En un momento en el que ha dejado de ser casi tabú abordar la conveniencia o no de perpetuar el encaje constitucional de 1978, cuyas debilidades han ido saliendo a la luz, adquiere mayor pertinencia el debate sobre si la alternativa entre monarquía y república es un tema accesorio, como siempre han sostenido los accidentalistas. El autor de este libro ya se había distinguido por un estudio histórico-constitucional sobre los orígenes del constitucionalismo español en el hecho jurídico del levantamiento popular de 1808. (V. su obra MEMORIA DE 1808, en coautoría con T. Ausín.)
Ahora analiza la diferencia entre monarquía y república con un análisis conceptual, estableciendo varios parámetros, a la vez que aduce evidencia histórico-empírica para sustentar su conclusión de que la diferencia sí importa.
El eje de su estudio es un planteamiento detallado de las funciones y tareas del poder moderador, necesario en un Estado constitucional, a pesar de que ni el esquema de Montesquieu ni el de Kelsen reconocían ese poder. (Tal vez Lorenzo Peña se inspira un poco en Carl Schmitt, aunque no lo cita entre sus fuentes.)
El autor piensa que un poder moderador acreditado y capacitado para asumir su tarea sólo es posible en una República. Y en particular toma como modelo el diseño constitucional de la II República Española (1931), ampliamente analizado en esta obra en contraste con la vigente constitución de 1978, en su opinión de factura muy inferior.
Sin embargo, su apego a ese modelo pasado queda bastante relativizado por su propuesta de un nuevo modelo de República, la que él llama `democracia justificativa', cuyo patrón de inspiración más próximo sería el helvético (aunque Lorenzo Peña no es para nada federalista, antes bien propone una República unitaria pero binacional, con bicapitalidad de Barcelona y Madrid).
En suma, se trata de una obra de gran originalidad y no poca audacia, muy argumentada, expuesta siempre con un estilo elegante, lúcido y sereno.
Sep 2013. Guayaquil (Ecuador)
Constitucionalismo republicano
Alexandra Cunalata
Los clásicos de la teoría política clasificaron los Estados en democracias, aristocracias y monarquías. La palabra "República" inicialmente significaba el "Estado", pero ya en el siglo XVI empieza a usarse, en una de sus acepciones, como significativa de "Estado no monárquico", fuera democrático o aristocrático. Pero la alternativa entre monarquía y república, que tuvo algunos (efímeros) momentos de hegemonía en el debate político (sobre todo en los períodos revolucionarios), se ha eclipsado hoy, cuando la dicotomía comúnmente aceptada es la que se da entre democracia y no-democracia (tildada con el comodín de "dictadura"), pensándose que hay monarquías democráticas, aunque, en rigor lógico, son hierros de madera. Esta excelente obra del jurista y filósofo Lorenzo peña y Gonzalo vuelve a poner las cosas en su sitio, restituyendo la centralidad de la alternativa entre monarquía y república.
diariojuridico.com - Derecho y Noticias Jurídicas
[vLex España]
Plaza y Valdés, nuevo partner editorial
Comments
1. Guadalupe Tapia says:
07/12/2009 at 5:16 am
Los libros jurídicos de la Editorial Plaza y Valdés son muy destacados y ofrecen una contribución valiosa al panorama de la edición en España sobre problemas del Derecho. Además de los aquí mencionados están otros: los ESTUDIOS REPUBLICANOS de Lorenzo Peña, con un estudio importante de la Constitución de la II República y su comparación con la de 1978 y con un análisis de los derechos humanos en su proyección internacional; la MEMORIA DE 1808 de Lorenzo Peña y Txetxu Ausín, con un análisis de los orígenes del constitucionalismo español y de los acontecimientos históricos de 1808 considerados como un hecho jurídico. Los enfoques de Lorenzo Peña y Txetxu Ausín (el grupo Jurilog del CSIC) presentan muchas particularidades y nos hacen salir del paisaje usual en la doctrina iusfilosófica actual.
Foro de la Librería Díaz de Santos (Madrid)
Borja Arnero: 2009-07-19 20:00:24
Si bien hemos podido leer últimamente un número de libros consagrados al republicanismo, éste se diferencia de todos ellos por hacer una aportación genuinamente española, sobre la base de una concepción inspirada en la tradición del republicanismo hispano (el krausismo, especialmente Giner de los Ríos) y en la Constitución de la II República, así como también del solidarismo francés (Léon Duguit), brindando, desde ese enfoque, un examen minucioso de problemas de derecho constitucional, en estrecha vinculación con una visión determinada de la historia de España. Creo que cualquier persona interesada en problemas de filosofía del derecho, ciencia política e historia constitucional de España tiene que leer este libro y tal vez criticarlo, porque sus audacias doctrinales son abundantes.
LIBRERÍAS MARCIAL PONS
Estudios republicanos
Comentarios sobre "Estudios republicanos"
May 2012. Valencia (España)
Análisis del poder moderador
Nieves Salinas
La principal contribución de este estudio de derecho constitucional es el pormenorizado análisis del concepto de poder moderador, con un cuidadoso examen de su significado y su alcance, con un recorrido de su implementación en las constituciones españolas de 1931 y de 1978. El autor nada contra la corriente, enfrentándose a la doctrina, no sólo mayoritaria, sino prácticamente unánime que reduce el poder moderador actual a una función simbólica. Por el contrario, el Dr. Lorenzo Peña entiende que se trata de una genuina potestad que contiene auténticas facultades de veto ejecutivo, legislativo e incluso constituyente, pero también el deber de ejercer, no meramente de ostentar, tales facultades según los valores constitucionales.
May 2013. Madrid (España)
¿Federal o Unitaria?
Martín García Palacios
Si repasamos en cualquier librería jurídica los libros que dedican atención a la cuestión de la forma de gobierno (o "forma de Estado" como pomposa y equívocamente se formuló en la Constitución de 1978), nos llamará la atención que esa gran cuestión, que tanto agitó los espíritus, esté casi ausente. Tampoco suele ocupar mucha atención en los libros rotulados como de ciencia política. Y menos aún abundan los estudios jurídico-constitucionales sobre el republicanismo en España.
Al margen de tales ausencias o carencias, en el ambiente extra-académico, pero quizá ahora también en el universitario, el todavía tímido interés por el tema republicano suele asociarse (en una confusión de géneros) con el federalismo.
Este libro de Lorenzo Peña afronta todos esos equívocos con una extraordinaria claridad, defendiendo con vigor el modelo de la República unitaria de 1931, analizada detalladamente en oposición al diseño constitucional, a su juicio poco democrático, de 1978, que él critica por su contenido y por el proceso de su gestación.
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Customer Reviews
Estudios Republicanos (Spanish Edition)
2 Reviews
Súbditos de la corona, September 23, 2010
By Maria Alonso (Madrid, Spain)
"El 14 de abril de 1931 los españoles dejaron de ser súbditos". Esta frase de uno de los capítulos de este libro de Lorenzo Peña resume el espíritu de la obra, cuyo núcleo es una reivindicación de la República de Trabajadores de toda clase que se pergeñó en la constitución republicana de 1931.
La destrucción de la República, según el análisis de Lorenzo Peña, fue preparada, organizada, maquinada y propulsada por el exiliado ex-monarca, Alfonso de Borbón y Habsburgo-Lorena, abuelo del soberano que hoy se sienta en el Trono. El objetivo de la sublevación militar conducida por el general Mola era facilitar esa restauración dinástica, que la tiranía falangista de Franco llevará a cabo paulatinamente, imponiendo los símbolos monárquicos (marcha real y bandera bicolor rojigualda) [1936], restableciendo el Reino [1947], designando sucedor a título de Rey [1969] y dejándolo situado en la Jefatura del Estado al fallecer [1975].
La Constitución de 1978, según Lorenzo Peña, no es una constitución democrática, sino que se subordina a la legitimidad dinástica supraconstitucional y erige a la Corona en un poder arbitral supremo, sin cuya promulgación y sanción no pueden adquirir vigencia ni las leyes ni los decretos ni los nombramientos ni tampoco las eventuales reformas de la propia Constitución --en la cual, por otro lado, la institución regia queda acorazada con un estatuto de cuasi-intangibilidad. El monarca es inviolable; por ende, indestronable. Aun en el supuesto de regencia, esta Constitución se distancia de las liberal-monárquicas del siglo XIX (las de 1812, 1837, 1855, 1869) al impedir que la regencia pueda recaer en un individuo extraño a la dinastía o a la familia reinante.
Estamos en todo eso alejadísimos de los principios genuinamente democráticos de la constitución republicana.
Otra de las partes del libro que más merecen destacarse es un estudio histórico incorporado que refuta la afirmación del artículo 57.1 de la Constitución vigente según el cual el soberano encarna una legitimidad histórica de la dinastía reinante. Tal legitimidad es zarandeada con el recuerdo de sus raíces y de sus vías de transmisión. Especial revlieve tiene, a este respecto, el salto de la casa de Austria a la de Borbón en 1700, que, a juicio del autor, implicó una quiebra de la legalidad, por ser nulo e inválido el testamento de Carlos II y carecer legalmente de legitimidad hereditaria para reinar en España el personaje designado en tal testamento, el duque de Anjou, que reinará como Felipe V. Todo eso puede parecer una curiosidad histórica, pero Lorenzo Peña lo toma muy en serio, porque, si en esos eslabones se ha roto la transmisión dinástica legítima, mal puede estar fundada la actual constitución al supeditarse a esa legitimidad dinástica supraconstitucional.
Muchos estarán en radical desacuerdo con las tesis republicanas y republicanistas de Lorenzo Peña, pero sus argumentos no se pueden ignorar ni es razonable seguir hablando de los problemas del constitucionalismo español sin abordar las consideraciones de este libro, sea para sumarse a ellas, sea para criticarlas.
La potestad regia en el sistema político español
July 11, 2012
By Julio Miranda (Hispania)
El libro ESTUDIOS REPUBLICANOS ofrece una lectura de la Constitución española de 1978 que rompe totalmente con la visión usual, defendida de modo prácticamente unánime por la doctrina jurídico-constitucional, a saber: que, en el marco de la Ley Fundamental promulgada el 27 de dic. de 1978, la Corona desempeña un papel meramente simbólico, protocolario o figurativo.
Refuta esa tesis el autor con una salva de objeciones contundentes. Por un lado, se pasa minuciosamente revista al propio texto constitucional, leyendo sus preceptos en el sentido literal de las palabras. Por otro lado, se hacen comparaciones con otras constituciones monárquicas, como la belga. En tercer lugar, se defienden pautas hermenéuticas de la Constitución a partir de su proceso de elaboración, aprobación, promulgación y sanción, teniendo en cuenta que ese transfondo histórico-político es el marco idóneo para interpretar el texto vigente.
La conclusión a la que llega el autor es que la actual Constitución configura un régimen político de monarquía limitada en el cual el Soberano está investido de amplísimas potestades, de suerte que el poder arbitral y moderador no se le atribuye por una cláusula de estilo sino acompañado de un arsenal de prerrogativas que hacen de él el decisor supremo de todas las funciones estatales: la legislativa, la ejecutiva, la jurisdiccional e incluso el propio poder constituyente.
El autor se esfuerza por demostrar asimismo que la diferencia entre monarquía y república repercute en las probabilidades de orientación política, lo cual sólo puede explicarse porque las coronas no son meros adornos, sino que, a menudo de manera oculta, pesan fuertemente en el equilibrio de poderes para inclinar la balanza del lado más acorde con las preferencias de las élites encastilladas.
Es de esperar que tales argumentos sean considerados con atención y cuidadosamente rebatidos.
Casa del libro
ESTUDIOS REPUBLICANOS (En papel)
LORENZO PEÑA, PLAZA Y VALDES, 2009
ISBN 9788496780538
Opiniones de los lectores sobre "ESTUDIOS REPUBLICANOS "
Mostrando 1 a 4 de 4 resultados
Lector anónimo
Me parece un libro excelente. Aborda con valentía e inteligencia el estudio de la sociedad de derecho y los valores más importantes del ser humano.
Un libro de escritura elegantísima, lleno de razón y pasión, que absorbe al lector y que hace fácil lo difícil. Una prosa bien construida, una argumentación sólida, un planteamiento político y jurídico muy personal, lleno de novedad, sin concesiones. Un republicanismo cristalino, auténtico, rama del tronco del krausismo español. Se aprecia la influencia de Francisco Giner de los Ríos. Y además una mina de oro por su erudición.
Los ESTUDIOS REPUBLICANOS de Lorenzo Peña constituyen la mejor investigación disponible sobre la Constitución republicana de 1931 y sobre el valor perenne del modelo que encarna, la República de Trabajadores de toda clase, con un análisis comparativo entre esa Constitución y la monárquica de 1978. refutando algunos mitos acerca de ésta, demostrando las amplias potestades que confiere al Trono y cuáles son sus fundamentos de legitimidad, o la falta de tales fundamentos.
Además ofrece una propuesta de democracia alternativa y una visión republicana orientada a una República universal.
Lector anónimo
Muchos piensan que de suyo la república es mejor pero la monarquía, ya que está, no hace daño. Este libro refuta esa opinión con argumentos muy sólidos y convincentes y muestra que la manera en que se implantó la actual monarquía española fue jurídicamente inválida y políticamente deshonesta, por lo cual, cuando se plantea una desacralización del actual texto constitucional en España, lo primero que habría que replantearse es la opción republicana, la recuperación de la memoria de la República de trabajadores de toda clase, la de 1931, como una fórmula de progreso social en libertad y de convivencia humanista.
#Criticadelibros.org
Estudios Republicanos
Lorenzo Peña
Rústica. Castellano 2009.
ISBN 8496780538 / 84-96780-53-8
EAN 9788496780538
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Gloria Agra
Republicanismo hispano
Es un lugar común la afirmación de que en el actual sistema democrático español la Corona juega un papel puramente decorativo y que sus funciones son esencialmente simbólicas.
Frente a esa tesis este libro presenta una sólida argumentación doctrinal, con un análisis detallado de los derechos y deberes del Trono en la actual configuración constitucional española, demostrando concluyentemente que las prerrogativas del monarca son enormes y que el juego de las diversas cláusulas de la carta magna de 1978 extienden su potestad arbitral y moderadora hasta hacer de ella un poder extensísimo, dotado de una legitimidad supraconstitucional en virtud del reconocimiento de su prorrogativa dinástica anterior y superior a la constitución, que ésta reconoce y no crea.
Ese análisis viene en este libro contrastado con el de la constitución republicana de 1931, que, a juicio del autor, sí configura una genuina democracia avanzada.
Todo ello en el marco de una filosofía política que erige la hermandad en valor supremo y que elabora ese ideal o valor en el transfondo de la tradición progresista y republicana latina, como el solidarismo francés y, en España, la obra de Francisco Giner de los Ríos y su desarrollo en el espíritu de los hombres y las mujeres que en 1931 establecieron la República de Trabajadores de toda clase.
(Estudios Republicanos)
Porfirio Olano
Republicanismo jurídico
En España o en cualquier otro país hasta 1990 hablar de republicanismo era hablar de un sistema jurídico-constitucional sin monarquía. En la tradición de la filosofía política la monarquía ha tendido a confundirse con la monocracia, o el poder de uno. Pero justamente, si esa confusión ha sido frecuente en la filosofía política, no lo ha sido en la teoría jurídico-constitucional, donde la monarquía se ha definido por unos rasgos institucionales, aunque el perfil no haya quedado nunca perfectamente fijado. Desde 1990 o así se ha difundido un nuevo PSEUDO-republicanismo, que elude tal configuración jurídica para entender lo de "republicanismo" en el sentido de la difusión de una moral colectiva de participación ciudadana, centrada en un principio de libertad como no-dominación; un concepto absolutamente confuso y hasta vacío.
Lorenzo Peña en este libro somete a fuerte crítica ese pseudorrepublicanismo, al que denomina, más apropiadamente, ciudadanismo (algunos de sus adeptos como Philip Pettit hablan ahora de civicismo). La legión de seguidores hispanoablantes de esas ideas ciudadanistas hallarán en el republicanismo jurídico de Peña un serio contrincante, dispuesto a disputarles su membrete. Y es que para el profesor Peña lo característico del republicanismo es el rechazo al sistema jurídico de la monarquía, que él caracteriza en una serie de rasgos: transmisión hereditaria y ejercicio vitalicio de la jefatura del Estado; existencia de una aristocracia al menos simbólicamente vinculada a la dinastía reinante; sacralidad de la función regia, marcada por algún tipo de íntimo nexo entre la misma y una religión con un estatus oficial o cuasi-oficial; tratamiento mayestático reservado a esa dignidad; rango supraconstitucional de la potestad y legitimidad dinástica, considerada como por encima de las constituciones, que vienen y van; castigo penal reforzado de cualesquiera opiniones que atenten contra esa majestad regia y dinástica; juramentos de lealtad a la Corona y a su titular.
Lorenzo Peña prueba que hay una correlación estadística entre el carácter monárquico y la tendencia socialmente retardataria y el alineamiento militar intrusivo y de hegemonía armada e intervencionismo bélico. Por todo ello rechaza la neutralidad de los pseudorrepublicanismos en la opción entre monarquía y república. Por otro lado, defiende la libertad de conciencia frente a la preconización ciudadanista de las "virtudes cívicas", distinguiendo los niveles del Derecho y de la moral. El Derecho regula las conductas y sólo puede tomar en consideración las creencias o los sentimientos cuando repercuten en conductas ilícitas. En suma, tenemos aquí un auténtico y genuino republicanismo jurídico. (Estudios Republicanos)
esliteratura.com
García del Castañar
Martes 3-Sep-13
El otro día publicaba un suelto D. José Luis Manzanares Samaniego, que venía a ser un elogio, si no de la monarquía en sí, al menos de la borbónica actual en España, lamentando que la agitación republicana, al asociar los símbolos de la República con reclamaciones contestables, no favorezca nada la posible llegada a España de una nueva República.
Lo que pide lo ofrece este libro: un análisis jurídico sereno, con sólido fundamento histórico y filosófico, que, demostrando conclusivamente la superioridad del sistema republicano y examinando el déficit democrático y de legitimidad de la actual monarquía, ofrece la mejor contribución doctrinal (casi la única) para optar de nuevo por una República en España.
gandhi.publidisa.com
Un republicanismo fetén
por Yolanda Pérez Duero
El libro que nos ofrece Lorenzo Peña contiene la propuesta de un republicanismo de verdad. Es republicanismo auténtico por dos motivos.
En primer lugar, es una propuesta de régimen político republicano, siendo su libro lo único que hemos leído recientemente donde se encuentran razones para optar por la República aparte de la huera generalidad de que la realeza implica una atribución hiriente para un sentimiento de igual dignidad humana.
Lorenzo Peña va mucho más allá, desplegando un copioso cúmulo de argumentos sobre lo que significa la existencia de una monarquía hereditaria y también sobre la correlación entre las orientaciones políticas de un país y la pervivencia de una monarquía.
Por otro lado, razona ampliamente en el caso español, demostrando que, en el sistema de 1978, la Corona posee extensas prerrogativas y potestades que, si en circunstancias de tranquilidad pueden ejercerse discretamente y en la sombra, en llegándose a casos difíciles y a situaciones de crisis decidirán el rumbo de las cosas, siendo posible que el Trono opte por reemplazar el actual sistema por otro, igual que en 1977-78 esa misma monarquía optó por hacer un cambio de instituciones políticas para salvar la continuidad dinástica.
En segundo lugar, el republicanismo de Lorenzo Peña es auténtico porque no es genérico o abstracto, no es una teoría en el aire, al margen de los hechos histórico-sociales, sino una teoría encarnada en un aquí y ahora y proyectada a una realidad concreta, que es la del autor, un intelectual republicano español que piensa desde la problemática específicamente hispana, desde la historia de España y desde la triple experiencia constitucional de la II República (a la cual toma como modelo), del régimen totalitario que la destruyó y de la monarquía de componenda que en 1978 aseguró la pervivencia de buena parte del legado de ese régimen.
Todo ello escrito admirablemente, con un castellano que hoy, por desgracia, abunda poco.
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Estudios republicanos
Author: Lorenzo Pen~a
Publisher: Barcelona : Plaza y Valde's, 2009
ISBN/ISSN: 9788496780538 8496780538
OCLC:407014903
Notes: Study of Spanish Republicanism, focused on 1931 Spanish Constitution compared to the 1978 one.
Reviews
Republican Studies
by Turriseburnea (WorldCat user published 2010-09-17) Excellent
Republicanism is an important trend within modern political philosophy which has arisen as an alternative to both individualistic liberalism and communitarian collectivism. However, Lorenzo Peña's republicanism has virtually nothing in common with that line of thought, which he discusses and rejects; he calls it "citizeism" and disputes the appropriateness of labelling it "republicanism".
Lorenzo Peña takes republicanism, instead, in the classical legal meaning, going back to anti-monarchical thinkers, from Demosthenes to the French Radical-socialists, such as León Bourgeois, as well as the Spanish own tradition of progressive philosophers of law, whose influence determined the content of the Spanish Republican Constitution of 1931, which tjhe author vindicates and analyzes.
As against the claim that, for all purposes, a monarchy and a republic amount to almost the same thing, Lorenzo Peña details a number of fundamental differences. He contends that there are several common features of monarchical or dynastic regimes. He applies his analysis to a thorogh juridical scanning of the current Spanish constitution, which, in his opinion, bestows broad powers and a sovereign prerogative on the King, as supreme Arbitrator whose legitimacy is assumed as a supraconstitutional entitlement; in fact the current Constitution draws its binding force from the Sovereign's decision to sanction and enact it, even if technically that decision was illegal at the time it was taken (december 1978).
Although Lorenzo Peña is mainly concerned with building up a legal frame for a republican restoration in his country, Spain, he looks forward to attaining a world-wide human republic, a distant goal to which he devotes several chapters in his book.
Publicado en muchoslibros.com (acc. Dic 29, 2012)
Sobre el libro Estudios republicanos: contribución a
la filosofía política y jurídica
Muchos piensan que da igual que haya monarquía o república y este libro refuta esa equivocada creencia, proponiendo una perspectiva de República universal como gestión colectiva por toda la humanidad de ese bien común que es el Planeta Tierra.
La defensa integral de los derechos humanos, incluidos los de bienestar, no es, según Lorenzo Peña, indiferente a la opción por una u otra forma de gobierno, sino que encuentra su marco más adecuado en la República, como organización del bien público sin sujeción a intereses privados, como lo son los dinásticos. Lorenzo Peña va más lejos y esboza un horizonte de república universal en el que el planeta Tierra sea compartido como un bien público por todos los seres humanos, gracias a un reparto global de la riqueza, para lo que hay, según él, que superar las actuales estructuras de hegemonía imperialista y de bloques regionales.
Comentario de Domingo Pastor.
Republicanismo de pura cepa
by etelvinayuso (WorldCat user published 2010-11-11) Excellent
¿Qué es una República? ¿Qué ventajas, o qué inconvenientes, tiene un régimen político republicano frente a una monarquía? ¿No hay, en el fondo, poca diferencia? ¿No se puede decir, en algún sentido, que en España existe un sistema republicano?
Lorenzo Peña contesta que rotundamente hay diferencias sustanciales y muy significativas entre monarquías y repúblicas y que el sistema político posfranquista existente en España y organizado según la constitución de diciembre de 1978 es una monarquía. Peña analiza, en particular, el poder moderador en la monarquía y en la república, tomando como eje de su comparación las potestades del Presidente de la República en la Constitución de 1931 y las del Trono en la constitución actual. Concluye que la prerrogativa del Rey de España en el actual ordenamiento le otorga un amplísimo poder arbitral y moderador, que le permite, y aun obliga, a vetar los decretos gubernativos que juzgue opuestos a la juridicidad constitucional o a la legitimidad dinástica supraconstitucional, a intervenir activamente en el funcionamiento de los demás poderes y, eventualmente, por los mismos motivos, a no sancionar ni promulgar leyes que, a su juicio, colisionen con esos fundamentos jurídicos. Mas por otro lado, el ejercicio de tales potestades lo realiza el Monarca estando exento de responsabilidad y siendo, vitalicia y hereditariamente, titular de la Corona en una legitimidad supraconstitucional que la propia constitución incorpora a sus principios básicos. Cualquier reforma de la constitución debería pasar igualmente por ese filtro que es el veto regio (por la vía de mera abstención, o sea de inhibición a la hora de sancionar-y-promulgar, requisito sin el cual ninguna norma legislativa puede adquirir vigencia).
Esa legitimidad dinástica viene, sin embargo, fuertemente cuestionada por Lorenzo Peña, al hacer un estudio histórico en el cual se concluye que la dinastía actualmente reinante no accedió legalmente al Trono sino que se apoderó de él por los actos de fuerza de Luis XIV, cuya amenaza bélica forzó a Carlos II a redactar, en un lecho de muerte, un testamento inválido y nulo a favor del duque de Anjou, excluyendo a la casa de Austria, la cual sí había estado asociada al período de grandeza española en el siglo de Oro.
Ese análisis histórico se combina con un planteamiento más general sobre la memoria republicana en el marco de una amplia recuperación de la memoria histórica nacional.
Como bisagra entre las consideraciones históricas y los análisis jurídico-constitucionales, Lorenzo Peña somete al escrutinio crítico la transición, llegando a conclusiones muy poco halag&udiaer;eñas para lo que fue un pacto político que, acogiéndose a las leyes fundamentales del reino franquistas, era ilegal desde cualquier punto de vista y tampoco estaba respaldado por una auténtica representación popular de carácter constituyente.
Por ello Lorenzo Peña estima que, todavía hoy, tal vez la Constitución republicana de 1931 no haya perdido del todo su vigencia. Tal vez lo mejor del libro sea el capítulo dedicado a esa constitución republicana y a la labor legislativa de la II República, a la cual, sin embargo, también dirige algunas críticas.
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Estudios republicanos: Contribución a la filosofía política y jurídica
Lector anónimo
Notable en muchísimos aspectos, uno de los más destacados de este libro es la abundancia y precisión de datos históricos. Sus aportaciones a la filosofía jurídica, al derecho constitucional y a la defensa de las libertades son, asímismo, de un enorme interés.
Lector anónimo
Al lado del neo-republicanismo de Philip Pettit, en parte como alternativa al mismo, este libro ofrece una filosofía política que no viene de la tradición anglosajona (aunque el autor pertenece, sin duda, como él mismo lo proclama y lo recalca, a la filosofía analítica), sino del ámbito de la tradición republicanista latina, del norte y del sur de los Pirineos, especialmente en dos vertientes: el solidarismo radical-socialista francés y el humanismo que, a través del krausismo español y la obra de Francisco Giner de los Ríos, inspiró a la pléyade de juristas que trabajaron en la elaboración de la Constitución de la II República (1931).
En el transfondo de ese enfoque y desde esa tradición, el libro hace un estudio del tema de la memoria histórica, propugnando una visión positiva, frente a la usual reducción de la memoria histórica al recuerdo colectivo de las tragedias y de los pesares. Para Lorenzo Peña lo esencial es rememorar los avances sociales, axiológicos y culturales que se alcanzaron desde los planteamientos republicanos, como herederos de una corriente histórica plurisecular de aspiraciones nacionales, muchas veces enfrentadas a los intereses de la dinastía actualmente reinante en España.
De gran interés es toda la última parte del libro, que esboza varios lineamientos en el horizonte lejano de una República Universal.
La publicación de este libro fundamental es un gran acierto de la Editorial Plaza y Valdés, que, con esta y muchas otras obras, hace una aportación muy significativa a la causa de una cultura científica, jurídica y filosófica de gran altura.
Lector anónimo
¿Qué es una República? ¿Qué ventajas, o qué inconvenientes, tiene un régimen político republicano frente a una monarquía? ¿No hay, en el fondo, poca diferencia? ¿No se puede decir, en algún sentido, que en España existe un sistema republicano?
Lorenzo Peña contesta que rotundamente hay diferencias sustanciales y muy significativas entre monarquías y repúblicas y que el sistema político posfranquista existente en España y organizado según la constitución de diciembre de 1978 es una monarquía. Peña analiza, en particular, el poder moderador en la monarquía y en la república, tomando como eje de su comparación las potestades del Presidente de la República en la Constitución de 1931 y las del Trono en la constitución actual. Concluye que la prerrogativa del Rey de España en el actual ordenamiento le otorga un amplísimo poder arbitral y moderador, que le permite, y aun obliga, a vetar los decretos gubernativos que juzgue opuestos a la juridicidad constitucional o a la legitimidad dinástica supraconstitucional, a intervenir activamente en el funcionamiento de los demás poderes y, eventualmente, por los mismos motivos, a no sancionar ni promulgar leyes que, a su juicio, colisionen con esos fundamentos jurídicos. Mas por otro lado, el ejercicio de tales potestades lo realiza el Monarca estando exento de responsabilidad y siendo, vitalicia y hereditariamente, titular de la Corona en una legitimidad supraconstitucional que la propia constitución incorpora a sus principios básicos. Cualquier reforma de la constitución debería pasar igualmente por ese filtro que es el veto regio (por la vía de mera abstención, o sea de inhibición a la hora de sancionar-y-promulgar, requisito sin el cual ninguna norma legislativa puede adquirir vigencia).
Esa legitimidad dinástica viene, sin embargo, fuertemente cuestionada por Lorenzo Peña, al hacer un estudio histórico en el cual se concluye que la dinastía actualmente reinante no accedió legalmente al Trono sino que se apoderó de él por los actos de fuerza de Luis XIV, cuya amenaza bélica forzó a Carlos II a redactar, en un lecho de muerte, un testamento inválido y nulo a favor del duque de Anjou, excluyendo a la casa de Austria, la cual sí había estado asociada al período de grandeza española en el siglo de Oro.
Ese análisis histórico se combina con un planteamiento más general sobre la memoria republicana en el marco de una amplia recuperación de la memoria histórica nacional.
Como bisagra entre las consideraciones históricas y los análisis jurídico-constitucionales, Lorenzo Peña somete al escrutinio crítico la transición, llegando a conclusiones muy poco halag&udiaer;eñas para lo que fue un pacto político que, acogiéndose a las leyes fundamentales del reino franquistas, era ilegal desde cualquier punto de vista y tampoco estaba respaldado por una auténtica representación popular de carácter constituyente.
Por ello Lorenzo Peña estima que, todavía hoy, tal vez la Constitución republicana de 1931 no haya perdido del todo su vigencia. Tal vez lo mejor del libro sea el capítulo dedicado a esa constitución republicana y a la labor legislativa de la II República, a la cual, sin embargo, también dirige algunas críticas.
Nuria Fernández Joxa
As J.G.A. Pocock has shown, 17th century English republicans outdid the monarchomachs in claiming that liberty and monarchy are incompatible. Nowadays so-called civic neo-republicans contend that what is essential for a Republic (in their peculiar meaning) is the prevalence of freedom as non-domination which, to their lights, is possible under the rule of a constitutional sovereign.
Criticizing civic neo-republicanism, this book embraces Republican Republicanism, along the Latin tradition, taking as its influential sources French radicalism and solidarism and Spanish humanistic thoght, which inspired the Constitution of the II Spanish Republic (1931). It is a convincing plea for the elimination of monarchies, which, as Lorenzo Peña cogently shows, play a nasty political role in a number of countries even today.
The author advocates a Universal or Earthian Republic with a promotion of the value of human brotherhood and a reshaping of the relations between the North and the South of the Planet by means of a fair redistribution of wealth worldwide.
This book is a masterly essay in legal and political philosophy full of analytical clarity and rigour as well as scholarly erudition. Never acrimonious, it puts forward a strong anti-monarchical argumentation which, by the way, is also scathing for foreign policies favourable to the support of existing dynasties --e.g. that of the USA both in the thirties and now.
Librería Picasso
07.12.2009 María Pilar Sánchez Puga
Es una delicia leer un libro como este, con una defensa tan fuertemente argumentada de las ideas republicanas y una reivindicación tan sustancial y razonada de la memoria de la II República en una perspectiva humanista.
DonLibro:
Marcela
21/10/2012
Esto sí es republicanismo y no lo que se vende como tal con la prédica de las virtudes ciudadanas. Un republicanismo solidarista que preconiza la restauración de la República Española y confía en que, desarrollando la línea de la Constitución socializante de 1931, el Estado republicano español emprenda una gran obra de redistribución social y regeneración nacional, salvando a España de los males a que la ha llevado la monarquía borbónica.
Ciao.Es:
La opinión del consumidor en Ciao
Esclarecedor análisis jurídico-político de la República
04/09/2013 17:16
Recomendable : Sí
Detalles :
Hubo un tiempo en el que se decía que ningún Español era monárquico salvo el conde de Barcelona, sus parientes, allegados y escasos adeptos. En 1969 el ocupante de la jefatura del Estado designó un sucesor a título de rey, quien, como resultado de un cúmulo de circunstancias, ha consolidado, contra lo que pudieron ser sus propias expectativas, un trono, que sin embargo empieza a tambalearse.
Este libro del abogado y filósofo D. Lorenzo Peña ofrece un magistral análisis jurídico-político, de esa transición, de su transfondo, de las raíces históricas de la pretensión dinástica y del sistema implantado en 1978 por el voto del 59% del cuerpo electoral (del cual se había excluido a los millones de emigrantes y exiliados).
Es una obra de enorme erudición, de rigor demostrativo y de claridad conceptual. Indispensable para abordar los problemas de la España de hoy.
¿Qué libro leo?
Quelibroleo.com
Crítica de los lectores
margasama
Su nota: 10
¡Buen comentario! 1
No hacía falta esperar a los últimos acontecimientos, con el descrédito
para la institución monárquica, para la dinastía reinante (sólo se
salva Dª Sofía, que no pertenece a tal dinastía) y para las
perspectivas de regeneración sin retomar la opción republicana. Este
sensacional e impresionante libro del profesor Lorenzo Peña
desentrañaba convincentemente, ya hace 4 años, la significación
jurídico-política del republicanismo y la necesidad de un poder
moderador aureolado por el prestigio, que nunca viene con el nacimiento
y la gloria de los antepasados; menos cuando, en vez de gloria, sólo se
ha heredado de ellos infamia y bochorno.
popularlibros.com/libros/estudios-republicanos/287934/978-84-96780-53-8
El mejor texto del republicanismo español
Por Francisco Velasco Durán / 17.09.2013
El libro se subtitula modestamente "contribución a la filosofía política y jurídica". Es más que una mera contribución. Es un volumen impresionante que podría clasificarse como obra de Historia, de teoría política y de Derecho constitucional. Una obra que abandona los senderos trillados, que invoca autoridades hoy olvidadas y que hace quizá la más audaz aportación al pensamiento político en el ámbito de habla hispana.
El republicanismo, por fin
Por Ysabel Farfán López / 06.09.2013
Un sector minoritario de la doctrina filosófico-política ( quizá de eso que se llama "ciencia política") es el dizque "republicanismo" o "neo-republicanismo" que, en readlidad, de tal tiene sólo el nombre. ESTUDIOS REPUBLICANOS, una sólida y convincente obra del abogado, lógico y filósofo Lorenzo Peña y Gonzalo se abre justamente con una crítica demoledora de ese presunto neorrepublicanismo para, una vez aclaradas las cosas, ahondar en el genuino significado y alcance de la doctrina republicana, como opción jurídica y política por una forma de gobierno, que es la República, esencialmente definida como no-monarquía, o sea como exclusión de cualuquier potestad dinástica. Para Lorenzo Peña, la institución dinástica implica una privatización de lo público, al mezclar los asuntos de la Res Pública con los de una familia.
El Dr. Peña demuestra que ese maridaje es nocivo para las perspectivas de evolución progresista del Estado, conduciendo a una preponderancia de los círculos conservadores y de los intereses de las oligarquías ancladas en el pasado y en la riqueza.
El republicanismo de Peña identifica el Estado sin impurezas a la República y es, por ello, un estatismo, que reclama más Estado como una solución a los males por los que atraviesan las sociedades de este comienzo del siglo XXI.
Brillante estudio de la República como institución jurídica
Por Zulficar Huanca Huanca / 04.09.2013
Este magnífico libro se halla en la encrucijada de la historia de España, la teoría jurídica constitucional, y la filosofía política, ofreciendo un estudio de gran hondura y amplitud, lleno de vigor, de impecable escritura y que, pese a su profundidad y rigor, se deja leer con gran facilidad.